#1. Niega siempre que te estás enamorando: Si él / ella tiene indicios de que tú quizás quieres algo más puede que se asuste, y que acabe con esa relación.
#2. Hazte el duro / la dura: No es necesario que hagas "lo imposible" para quedar con esa persona o que renuncies a hacer otras cosas para estar juntos cuando en realidad tienes otros compromisos. Pues esta actitud a la larga se notará y tu "compañer@" notará esa dependencia.
#3. Haz que te conozca a fondo: No tengáis vergüenza el uno del otro, además de ser amigos, hazle tener en cuenta que puede contar contigo, pero con ese modo de ser de deciros siempre lo que pensáis del otro. Si realmente se siente a gusto a tu lado puede que no te deje escapar.
#4. Cuídal@: Que seáis un lío o como queráis llamarlo, no quiere decir que no le puedas dar algo de cariño ni ser romántico, siempre de una forma más dócil en un principio (para marcar los tiempos), pero cogiendo confianza paulatinamente.
#5. Sorprende a la otra persona: Haz cosas que no espere de ti... Desde una cita súper picante y subidita de tono hasta cosas más cotidianas como acompañarlo al dentista o a pasear a su perro.
#6. Pasa tiempo con él/ ella: Si intentas que además de tu amante sea amig@ y confesor/a, poco a poco harás que el concepto que tenga de tí sea el de una persona muy importante y necesaria en su vida y con esto, más de la mitad del trabajo echo para "robarle el corazón".
#7. Conoce a sus amigos y haz que también conozca a los tuyos: Puede ser un buen paso para crear vínculos de una forma más pública y hasta burlaros de lo que creéis que piensan. Y progresivamente... de empezar algo.
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